Razones clave:
Presentación web: HTML es legible para los navegadores, lo que lo hace ideal para mostrar datos XML en un formato intuitivo.
Visualización de datos: Convierte XML sin formato en tablas, gráficos o formularios HTML estructurados para una interpretación más sencilla.
Integración de la interfaz de usuario: Útil para incrustar datos XML en aplicaciones web, paneles de control o informes.
Automatización: Automatiza la creación de páginas web o informes a partir de archivos XML (por ejemplo, canales RSS o catálogos de productos).
Separación de datos y presentación: XML contiene los datos; HTML (a veces combinado con XSLT) gestiona la capa de visualización.
Tienes algunas opciones principales:
Herramientas en línea: Usa sitios web como FreeFormatter, ConvertSimple o XMLGrid para pegar XML y convertirlo a formato HTML.
XSLT (Transformaciones de lenguaje de hojas de estilo extensibles): Escribe un archivo XSL para definir cómo se debe transformar XML a HTML.
JavaScript:
Analiza XML con JavaScript y crea elementos DOM HTML dinámicamente.
Lenguajes del lado del servidor:
Use Python, PHP, Java o .NET para analizar XML y renderizar plantillas HTML según corresponda.
Debería usarlo cuando:
Mostrar datos XML en un sitio web (por ejemplo, feeds RSS, registros, listas de productos).
Generar informes o paneles a partir de datos XML estructurados.
Crear formatos legibles para uso empresarial o del cliente a partir de archivos XML técnicos.
Incrustar datos dinámicos en HTML usando XML como fuente.
Conversión de fuentes XML antiguas en vistas HTML para aplicaciones web modernas.